Águilas, Deporte y Cultura

jueves, 1 de noviembre de 2007

¡ Maldito “FLATO”!

Normalmente suelo escribir sobre cuestiones relacionadas con deporte, salud o cultura en general tal y como reza la cabecera de mi/vuestro blog, con la finalidad de dar respuestas a cuestiones concretas e intentando dar algunas ideas o ayuda a todo aquel que lea los artículos, pero esta vez no será así, ya que busco una respuesta o solución válida para algo que me pasa cada vez con más frecuencia.

Pues veréis, la cuestión es la siguiente:
Desde hace tiempo (casi desde que tengo uso de razón), vengo practicando algún deporte, y junto a él siempre me ha acompañado el famoso “flato”, ese dolor que yo asemejo al de un objeto punzante clavado en el abdomen.

Antes me pasaba sólo en ocasiones concretas tales como en algunas carreras de Mountain bike en las que solía participar, ya que fue mi deporte favorito durante mucho tiempo, y que por el contrario, ese dolor nunca me daba cuando entrenaba junto a mi “colega” Vicente Pastor, al cual aprovecho desde aquí para mandarle un saludo, achacando dicho dolor a los nervios que coges cuando estás compitiendo.

Sin embargo, ahora que he dejado este deporte (No por gusto, sino por problemas de tiempo), suelo practicar Footing, participando en alguna que otra competición junto con mi “Gran” Club (saludos a Cati, Mario y Rives). Pues bien, el dichoso “flato”, viene siendo cada vez más frecuente, sobre todo cuando compito en distancias cortas (5.000 o 10.000 mtrs), siendo este dolor a veces insoportable.

He llegado casi al borde de la “obsesión” y he buscado solución en revistas y páginas en Internet especializadas en el tema, encontrándome muchas teorías y remedios que está muy bien (comer dos o tres horas antes del ejercicio, evitar alimentos con mucho azúcar grasa y sal, no ingerir bebidas con gas, beber durante el ejercicio en sorbos pequeños…..), e incluso remedios “graciosos” rozando casi el masoquismo ya que recomiendan en algunas páginas (que prefiero no nombrar), golpearse fuertemente en el lado contrario al dolor, pellizcarse, e incluso mantener la respiración durante un minuto (pero ¿Como mantener la respiración haciendo deporte, si es cuando nuestro organismo requiere el máximo de oxígeno?).

La cuestión es que he probado algunos de estas recomendaciones sin ningún resultado, por lo que desde este medio me gustaría que si alguien está en el mismo caso que el mío y ha encontrado alguna solución válida, me lo comuniquéis, bien a mi correo o realizando el comentario dentro de este mismo artículo.

Espero vuestras noticias y aprovecho para dar un saludo a todos los “runners”, así como a todos aquellos que visitáis el blog.